Ir al contenido principal

Yerba del engaño

Miedo por la carencia del placentero
sumergido en el acto por vergüenza
sumiso ante el deseo de la carne
presa de la lujuria
actitudes lascivas reprimidas
invitaciones licenciosas
desconocidos acechando
Porque a veces soy un blanco fácil
difícil de retener
difícil de soltar
de relieves agridulces
comportamientos predecibles
masa homogénea cambiante
con engaños repetitivos
en una verdad de discusión filosófica.




A veces siento que vuelvo al origen después del origen, y a un pasado ya superado...
¿Será que no me canso de descubrir el fuego?

Comentarios

Entradas populares de este blog

Esencia del retorno

 Frente a la necesidad de ordenar mis ideas es que me entrego, literato, al compás de esta tinta discursiva, que aclara la complejitud de esta psique extraviada en sus propios significantes. Estoy a un paso de reencontrarme con mi esencia, y es el camino más árido que he recorrido hasta hoy, porque aun no logro conectarme con eso que está ahí, y que al parecer quiero tanto hacer, como lo que llevo haciendo hasta hoy. Avanzo en parsimonia, testificando en mi angustia el deseo de movilidad desenfrenada al que aspiro. Quiero regalarme ese entendimiento desde la paciencia, porque en esta papeleta declamo los frutos del viaje que hace un tiempo llevo en ruta, y que hoy por fin de alguna manera arriban y se asientan.

Esencia del pensamiento de locomoción troncal

Me agobia estar solo mas con nadie quiero estar. No me mires porque me cautivas de la misma forma en que luego te desecho. basta del alcohol basta de pensar basta de mi vida. Por un momento, mi vida detendría. Por un momento, mi vida, te tendría.

Yerba Nocturna

La verdad es que aun no puedo olvidarte, no debo olvidarte, te recuerdo, te reemplazo y te desarmo, rearmo en la inexistencia, mariposas en mi ser, me enamoro de tus ojos y suspiro en tu dormir. Continuar quiero, por tus manos sentir, en la cama de violentos pliegues y borrachos seres, anhelando ese beso que jamás me diste, que en tu boca dejé y que esperó por nacer, y que aunque no vino, se fue.